Coworking y oficinas

Elina

30/6/2022

Tips para el diseño correcto de oficinas coworking

El diseño de oficinas de coworking tiene unas directrices diferentes al que se sigue cuando lo que se busca es crear una oficina de uso único para una empresa o un profesional. En el coworking van a trabajar personas muy diferentes entre sí, que desarrollan tareas que pueden no tener nada que ver unas con otras, esto da lugar a la necesidad de que el espacio sea lo más neutro y flexible posible.

Consejos para un diseño práctico de un espacio de coworking

Que el espacio sea diáfano

En las oficinas tipo coworking los usuarios buscan algo más que un lugar desde el que trabajar y una forma de ahorrar costes operativos, quieren sentirse acompañados y poder interactuar con otros profesionales. De ahí la necesidad de que los espacios sean diáfanos, pero sin dejar de lado un poco de intimidad.

Por ejemplo, colocando junto a las mesas elementos divisorios como mamparas o paneles de vidrio. Estos amortiguan el ruido, aportan un poco de intimidad y, a la vez, no cierran demasiado el espacio.

Mobiliario ergonómico y de diseño

Está claro que el mobiliario empleado en los espacios para oficinas pequeñas debe ser ergonómico para que los usuarios puedan trabajar con total comodidad. Sin embargo, eso no quiere decir que haya que renunciar a la estética.

El freelance quiere sentirse a gusto en su lugar de trabajo, notar que encaja con su personalidad y con la identidad de su marca. De aquí se deriva la importancia de escoger muebles con un diseño muy cuidado y que incorporen alguna nota de color a la oficina, para que no parezca un lugar aséptico.

Utilización de las últimas tecnologías

La tecnología no es algo que pueda verse a simple vista, pero su presencia en un espacio de coworking puede influir en la decisión de los usuarios de alquilar o no un puesto de trabajo.

Más allá de cuestiones obvias como una buena conexión Wi-Fi, las oficinas de uso compartido implementan la tecnología pensando en otras necesidades de sus usuarios. Por ejemplo, instalando cerraduras electrónicas que faciliten el acceso al lugar de trabajo en cualquier momento, sin necesidad de depender de nadie.

Zonas comunes que potencien la comunicación

Las zonas de uso común son elementos que los freelance revisan mucho antes de contratar un coworking. Su diseño debe ser acorde con el resto del espacio de trabajo, pero sin perder de vista el hecho de que se trata de un lugar de descanso.

Las zonas comunes son espacios multifuncionales que sirven tanto para descansar, como para comer. Dado que uno de los objetivos de ir a las oficinas tipo coworking es socializar, estos lugares comunes deben potenciar esa comunicación. Eliminando barreras físicas y con un mobiliario que invite a tomarse unos minutos de desconexión y a charlar con otras personas.

El diseño de oficinas de coworking requiere tiempo y dedicación para resultar exitoso. Lo bueno es que el esfuerzo siempre merece la pena. Lo importante es tener en cuenta que se deben potenciar tanto los elementos que se ven como aquellos que no, pero que contribuyen a generar un ambiente de trabajo agradable.